"El pozo en que casi se ahogaron los perritos es un peligro también para niños y adultos mayores"

Los aullidos se escuchaban a casi 200 metros entre las casas del pasaje Mirador, en el sector de La Vara histórico, entre Puerto Montt y Alerce. Claro que fue la vecina de Sandra Aburto, quien le llamó por teléfono para pedir ayuda. Inmediatamente, junto a su hija, corrieron hasta un sitio particular cercano, cuya casa se encuentra desocupada. Desde ese lugar provenían los alaridos desgarradores de los animales. No los vieron a simple vista debido a los matorrales y porque habían caído al interior de un pozo lleno de agua que se encontraba en el sitio. No les importaron los cercos de alámbres de púas ni la profundidad del horificio. Saltaron y como pudieron comenzaron el improvisado rescate de los dos perros que encontraron allí. Estaban completamente sumergidos y ya casi no emitían sonidos. Se recostaron en el suelo y sacaron primero al más pequeño y luego al más grande, un akita, el que costó más debido a su peso. Los instantes de tensión y dramatismo quedaron plasmados en el video que grabaron en el lugar y que más tarde se hizo viral a través de las redes sociales.
 

“Fue muy estresante porque ya estaban terminando las fuerzas de los perritos. Si no llegamos la historia hubiera tenido otro fin. La verdad es que no pensamos en nada sólo en ayudarlos, de hecho salimos en pijama. Fue lo primero que se nos ocurrió para ganar tiempo. También llamamos a bomberos. Después me enteré que ese pozo tiene como seis metros de profundidad”, reflexionó esta mujer que reconoce amar a los animales. 

“De hecho, tengo cuatro perritos que he adoptado, pero que están en mi casa. Los que cayeron finalmente también tenían dueños. Después que los rescatamos, los seguimos y vimos que uno pertenece a una empresa cercana y el otro a una vivienda”, aclaró.
 

Luego de esta situación y con más calma, la vecina analiza el peligro que representa este lugar para todos quienes viven en el entorno a pesar que el pozo está en el interior de un terreno cercado. “Ese pozo es una irresponsabilidad del dueño. Es un peligro . Hago un llamado porque aquí no sólo pueden caer animales sino también niños y adultos mayores. Tiene que cerrar eso, es un peligro inminente. Y a las personas también que hagan conciencia con la tenencia responsable porque los perritos no pueden andar sueltos por ahí. No pueden andar en la calle solos si tienen dueño. Ellos sólo piden amor, un poquito de comida y agua, nada más. Por favor que tengan más conciencia", dice enérgica Sandra, quien reconoce que no midió las consecuencias de caer en el interior del pozo.

"Más tarde, después del rescate, lloré todo el resto del día. Me dio una migraña terrible pero por otro lado estaba contenta. Fue el estrés de saber que sus vidas dependían de nosotros”, cerró la vecina del pasaje Mirador.

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