Salmón Summit 2024 analizó los desafíos de la industria del salmón

Cuando el expresidente de la República Eduardo Frei Ruiz Tagle, llegó hasta el Teatro del Lago de Frutillar, se pudo constatar que destacadas figuras del mundo público, empresarial, académico, ambiental y de la propia industria acuícola, darían vida a un encuentro que tendría por objetivo analizar este sector con miras al año 2050. Tal fue el interés en el Salmón Summit 2024, que asistieron más de 1.200 personas que repletaron el recinto. La instancia fue organizada por SalmónChile como una manera de observar la industria desde diferentes perspectivas y con actores que incluso tienen visiones críticas del cultivo de peces en el mar.

En su charla, Eduardo Frei fue enfático en señalar que el salmón es la industria que cambió el sur de Chile sin un peso del Estado y que hoy es la segunda más relevante en el país en términos de exportaciones después de la minería. Por eso, al presidente del gremio organizador, Arturo Clement, le llamó la atención la ausencia de autoridades del gobierno central y regional. “Queremos que el gobierno se suba a este carro y que vea que efectivamente la salmonicultura y la acuicultura es una potencia para Chile. Y que no nos ignore y que la verdad que nosotros estamos y seguimos con ellos trabajando. El hecho de que no haya llegado ninguna autoridad central, ni tampoco la Delegada, ni el Gobernador, es como una señal.Me imagino que todo el mundo tiene como obligaciones y responsabilidades importantes pero nosotros sentíamos que esto era importante. Ahora, tampoco me quiero quedar en eso. Nosotros igual vamos a seguir conversando, igual vamos a seguir dialogando, igual queremos subir al carro el gobierno en esta discusión. Es súper importante para Chile, es súper importante para el sur de Chile" destacó el dirigente gremial

A frutillar también llegaron representantes de los principales gremios del empresariado chileno como la Confederación de la Producción y el Comercio, CPC y la SOFOFA, además de destacados economistas y ex ministros de Estado de diferentes administraciones. Todos valoraron el nivel de las exposiciones, la masiva participación y la capacidad de enfrentar los desafíos.

Ricardo Mewes, presidente de la CPC, declaró que “esta es una industria que es la segunda mayor exportadora del país, genera 70.000 puestos de trabajo, genera también trabajo para cerca de 4.000 pymes de seis regiones, no solamente de esta región sino que de seis regiones del país. Por lo tanto, creo que hay que potenciarla, tenemos que tratar de que efectivamente tengan cumpliendo todas las normas medioambientales, pero tenga un desarrollo y, como yo dije en mi intervención, acompañada del Estado para que realmente podamos desarrollar, no solamente aquí en la región sino que también en Magallanes, en Aysén y Chile sea un gran productor de salmones en el mundo.”

En tanto que el presidente de la comisión nacional de evaluación y productividad, Rafael Bergoeing, agregó que los 90 “la fruticultura ya era muy importante y hoy día las exportaciones de salmón la superan y la superan por mucho. Por lo tanto, si eso ocurrió en los últimos 30, 40 años, no tiene por qué no ocurrir hacia adelante. Pero eso requiere, entre otras cosas, por ejemplo, requiere que exista una política nacional de desarrollo a largo plazo que coordine a los distintos actores, los públicos y los privados, para que en torno a metas comunes se tomen las decisiones que alineen a todos. Por ejemplo, en el caso noruego, por ahí por el 2014, la producción de Noruega de salmones era superior al millón de toneladas, el compromiso que se asumió es al 2050. A mí me tocó trabajar en el metro, son proyectos a largo plazo. No existe en Chile hoy día un plan de desarrollo a 30 o 40 años”.

Se sumaron también los planteamientos en materias medioambientales, los cambios en las legislaciones, como la ley Lafkenche, entre otros. Todo a través de paneles de conversación. La idea siempre es conseguir una industria más sustentable. Al respecto Josefina Monge, del Sistema de Empresas B de Chile, declaró que este sector “con tanto potencial y con tantos desafíos, se están haciendo las preguntas sobre cómo quiere verse en los próximos años y tomando los desafíos con diálogo, sin excluir a nadie. Vemos acá personas del mundo sindical, del mundo ambientalista, del mundo político, cosas que me parecen muy interesantes y muy valiosas. El camino que falta es que exista una norma específica para toda la industria pesquera y acuícola, que a nivel global no está lista”.

Una visión más crítica exhibió la Directora Ejecutiva de ONG Oceana, Liesbeth Van Der Meer, quien declaró que “la conservación es parte del ecosistema y que nosotros también estamos preocupados por lo que pasa en las aguas de nuestro país y estamos también dispuestos a dialogar para que esto funcione y establecer específicamente las certezas y también los espacios en donde se puede producir, pero también donde se puede conservar. Ellos fue el que mencionamos en escapes… creo que el problema de los antibióticos, de los escapes, de la transparencia y de la sobreproducción son problemas que se deben abordar y lo hemos hecho en conjunto. Sin embargo, últimamente hemos estado más distanciados y creo que esta es una forma de empezar a dialogar sobre los problemas específicos que tiene hoy día la salmonicultura en nuestro país”.

Los desafíos son amplios para el llamado mundo del salmón y significan la aplicación de una serie de procesos, los que dicen se irán materializando a fin de concretar una industria más amigable con el medio ambiente y que siga siendo la principal fuente de empleo en la zona sur-austral de Chile.

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